Arthur Conan Doyle
Arthur Conan Doyle (1859-1930) descendía de una noble familia irlandesa y cursó estudios de Medicina. Sin embargo, nunca ejerció, pues apenas dos años después de licenciarse en 1885 dio a luz el primero de sus relatos de suspense, Estudio en escarlata (1887). Su éxito fue tan grande e inmediato, que nuestro autor ya no dejaría de escribir. El personaje creado por él, su detective Sherlock Holmes, se hizo famosísimo y protagonizó nada menos que sesenta títulos. Entre los más conocidos se encuentran El perro de los Baskerville, El valle del terror o los relatos incluidos en su libro Las aventuras de Sherlock Holmes, publicado en Gribaudo. También cultivó la ciencia ficción, la novela histórica y otros géneros. En 1900 dio a luz su libro más extenso, La guerra de los bóers, y se pronunció en favor de la contienda británica en África. Según su opinión fue esto sobre todo lo que favoreció su nombramiento como caballero de la Orden del Imperio dos años después. Había alcanzado un lugar de prestigio, con apenas cuarenta años. Poco después (1906) murió su esposa Louise Hawkins y se casó con la médium Jean Elizabeth Leckie. Este vínculo con las ciencias ocultas se acrecentó tras la desaparición de su hijo Kingsley en la Primera Guerra Mundial. Del vínculo directo con el espiritismo nació su Historia del espiritismo (1926) así como numerosas polémicas, por ejemplo, contra su amigo Harry Houdini. Fue asimismo aficionado al fútbol, al críquet y al golf, entre otras pasiones. Murió de un ataque al corazón en la ciudad de Crowborough, en donde había residido durante veintitrés años.